Celebrar 108° años de entrega y servicio en bien de la formación de tantas generaciones, es motivo más que suficiente para agradecer a Dios su bondad y ternura para con las familias, la comuna de Recoleta y la Iglesia; por ello durante la semana de aniversario de la escuela, realizamos actividades con nuestros delegados de pastoral de padres de cada curso, estudiantes y con toda la comunidad educativa.
El lunes 24 de octubre, día oficial del aniversario de la escuela, los apoderados que participan en Pastoral se reunieron con la profesora Lorena, encargada de pastoral y miembro del Equipo de Gestión, para celebrar y compartir; al día siguiente, tuvimos una mañana muy entretenida con actividades recreativas en las
que participaron todos los estudiantes, hubo también competencias entre alianzas organizadas por los estudiantes y profesoras jefes de los octavos y finalizamos la semana celebrando en torno a Jesús Eucaristía.
La misa fue presidida por Monseñor Alberto Lorenzelli, obispo auxiliar y vicario general de la Arquidiócesis de Santiago. La celebración fue acompañada por las hermanas que conforman el Equipo de Liderazgo provincial, madre Ana Teresa Araya, hermana Claudia Ruiz y sra. Yeri Contreras quienes son parte del directorio de la fundación educacional, también asistieron algunas residentas y personal del Hogar San José, algunos estudiantes en
representación de su curso, docentes, asistentes de la educación, padres y apoderados.
Luego de la Celebración Eucarística, la comunidad e invitados compartimos un fraternal almuerzo, y entregamos un galardón a los profesores que cumplieron 10 años de permanencia en la escuela.
Con gran alegría recibimos la Bendición Apostólica de Su Santidad papa Francisco, regalo enviado por monseñor Julio Larrondo a nuestro director, a las hermanas y a comunidad educativa.
Nuestro director nos regaló un profundo mensaje en el que nos invitó a mirar a Jesús y pedir que al igual que Él, tengamos fuerza para mejorar todo: “ Estoy seguro de que, si somos capaces de seguir su ejemplo, de modelar
nuestra conducta de educadores según sus palabras y gestos, su espíritu y misión, estaremos construyendo una escuela verdaderamente inclusiva y servidora de los más necesitados y excluidos”
Agradecemos a Dios Padre Providente por esta larga trayectoria de esfuerzo y dedicación de cada miembro de la comunidad, ya que cada uno/a aporta en la construcción y consolidación del proyecto educativo institucional.
